Yanel - Microcentro Reincidencia con la dulce Yanel y el chupa chupa

Colegatos,
Esta experiencia data de lunes 27/5-xxxx.
Conozco a Yanel desde hace bastante, 1 año o más. He descrito unas experiencias con ella pero es una mínima fracción del innombrable número de veces que he visitado su depto en Tucuman al xxx.
El depto de Yanel está limpio y bien organizado. El baño está igualmente bien y muy cómodo.

Tengo un "acuerdo" con Yanel en que me diga las cosas que le gustan. Prefiero hacer lo que le causa placer ya que mis gustos son amplios. De esa manera hemos desarrollado una relación de placer mutuo y sabemos cuando está bien o no. Me gustan los juguetes para las chicas pero Yanel no tiene mucho apetito por ese lado. Su amiga Ángeles bautizó uno de mis juguetes como "chupa chupa" por obvias razones. Es de la nueva generación de juguetes que vibran y chupan el clitoris. Ángeles se lo comentó a Yanel y basado sobre esa experiencia (lo describiré aparte) me pidió que lo lleve esta vez.

Comenzamos como siempre con una cabalgata de besos y abrazos con ternura y dulzura. Se vino el garche durante un rato para calmar los espíritus. Le propongo utilizar el "chupa chupa". Se lo aplica y de inmediato me dice que está bueno. Luego cierra los ojos y parece flotar en placer. Garche con el juguete hace que Yanel disfruta aún más y a mi me afecta a un nivel de calentura muy difícil de aguantar. En efecto tengo dificultad de recordarme entre las nubes de placer vivido. Le pedí a Yanel de subirse encima ya que se que le gusta. Siguió con el "chupa chupa", se dio vuelta con la espalda hacia mi. Siguió un rato así hasta que me dieron muchas ganas de sentir su concha. Con "facesitting" aplastó su concha en mi boca y traté de hacer como si me zambullía en sus delicias. Cabalgaba de adelante hacia atrás y delante más y más hasta que la paré teniendo su * en mi boca. Me lo entregó con much gusto y seguimos la chupada yendo en un vaivén de movimientos de placer. Habiendo explorado lo suficiente esos placeres se sentó de vuelta sobre mis caderas. Estábamos muy calientes y le propuse experimentar una doble penetración con un juguete que había traído a ese efecto. Se lo había comentado unas veces pero estaba muy dudosa hasta ahora que aceptó por calentura. Le entrego el juguete y siento como lo introduce en su cola y el espacio se achica en la concha. Cada vez que logro convencer a una chica de hacerlo es igual de impresionante. El placer se multiplica y no solamente par a mi porque siento que Yanel se mueve más y más rápidamente. Siento como su concha comienza a contraerse rítmicamente para llegar a una contracción continua cuando acaba. Acabamos juntos y quedamos un poco atontados pero Yanel sigue moviéndose y es tan grande la contracción de su concha que es un poco difícil moverse porque quedamos pegados.

Le pregunté si quería que lo escriba o no. Me dijo que era un servicio especial para mi y que necesitaría estar muy, pero muy, caliente para aceptar la doble penetración otra vez.

Después de tanta emoción charlamos un buen rato y nos pusimos al tanto de las cosas y de la vida de lo que había pasado en los pocos días de no habernos visto.

Que les sirva. No puedo hacer otra cosa que recomendarla.

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