Perdoname Agostina, es que no fui con mi diablo

Perdoname Agostina, es que no fui con mi diablo

Amigos, he visitado a Agostina


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Todo arrancó con esta pregunta de un colega:

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voy a contestarle: Si, es ella tal cual. Salvo los ojos comprados, el resto es. Es verdad que entre el talento del fotógrafo, los “retoques artísticos” y la infaltable dosis de calentura que provocan sus fotos, uno dice antes y después de verla: ¡pero que pedazo de hembra, my god!, y que se olvida un poco de que sean xxx% fidedignas.

La otra noche fui a una fiesta insuperable
donde todos eran buenos amigos.
Se reían, coqueteaban desenvueltos
mientras otros gastaban simpatía.
Con eso por delante, me costó coordinar con ella, pero por boludeo sin sentido, nada grave. Te recibe en su departamento que comparte con otra dama, en la zona de Salguero y Paraguay. Por dos lucas te da un servicio completo de una hora. Si va a hotel son tres lucas mas el taxi.
Pero cuando finalmente logro cerrar el asunto, cantidad de eventos bizarros me empezaron a correr de eje, ya que me cuesta poco.
Primero llego al lugar, luego de atravesar desde el centro doscientos piquetes, cuarenta operativos de tránsito inexplicables y los insufribles de siempre masturbándose al volante en las calles. Llegué entonces un poco sacadito, hay un estacionamiento enfrente.
Faltaban diez minutos para las cuatro, poco tiempo para mi, que me gusta conectarme con lo que voy a hacer. Me quedo en la vereda de enfrente, y el edificio contiguo está en construcción, con el taladro rotopercutor incesante a la altura del mismo piso, el 5to. Hice la mueca de “hasta acá me persigue el laburo” y me quedo esperando que me den el departamento. Llamo faltando un minuto, y me lo dan. Toco timbre, y junto conmigo había un chabón en bermudas, con cara de Rodriguez Larreta pero con cejas finas. Le faltaba la bici de Glovo. Baja una rubia en shorts, que resultó ser una “asistente”. Ahí me doy cuenta que… ¡los tres vamos al mismo lado todos juntos en el ascensor mínimo…!. RL resultó un cliente de la otra dama que comparte el depto. con Agostina. Cuac.
Bueno, que se yo. Me hinchó las pelotas la falta de cuidado para que no nos crucemos.
El departamento tiene un living, dos habitaciones (sin aire la mía) y un baño. Espero que llegue Agostina, que está demorada, cinco minutos.
Esperé vestido (si no era la de las fotos me iba a la mierda) dentro de la habitación, chiquita con una cama de plaza y media bastante cagada a palos. Placard, dos mesitas de luz.
Llega Agostina, alta y sonriente. Vestidito ceñido negro mini que agarra sus mega gomas. Era nomás, pero de ojos oscuros. Es morocha, de piel trigueña mate, y tiene esos treinta y cinco muy muy bien llevados. Lindas gambas largas y torneadas y un culo bastante bueno, siendo una mujer de huesos grandes. Su rostro es agradable, cabello negro lacio tupido y largo. Está en línea o sea no le sobra ni le falta un gramo. Nada de fitness.
Ahí vi que no se bien porqué la elegí, pues no es mi tipo. Demasiada cantidad de mujer. Pero bueno, no podía decir me cagaron. De parados empezamos a besarnos vestidos. Le pedí toalla para lavarme un poco al menos. Sale a buscar una toalla, tarda un poco, vuelve y me la da. El baño estaba ocupado.

Pero yo no encontraba la sonrisa,
qué insensato,
perdoname, es que no fui con mi diablo,
la verdad es que no soy nada sin mi diablo,
la verdad es que no soy nada sin mi diablo.
Sigo tratando de hacer algo mientras espero el biorci. Ahí empecé a patinar. A derrapar en realidad. Yo, no encontraba el ritmo, el lugar y el estímulo. Estaba exasperantemente torpe, con acciones cortas y absurdas. Ella se dejaba hacer, pero yo estaba particularmente nabo.
Como a los diez minutos, se libera el baño. Voy, me lavo. Vuelvo, sigo. Bah, sigo es una forma de decir. Trato de besar pero la boca muy abierta me avisa que es para después, en el mejor de los casos. La pongo en bolas, es realmente exuberante.
Tengo un repalo. Me hace un oral sin, bastante bueno. Pero tengo que cuidarme porque es como que si me tocan, acabo. Así cerrando el orto, corto también las iniciativas de ella.
Con igual desatino desalentador, le empiezo a chupar la cheicon, todo bien por ahí abajo pero no puedo hacerlo bien, cambio demasiadas veces de acción demasiado rápido para que ella responda. La puta madre.
Arrodillado en la cama, otra vez el pete sin. Le puerteo el ojete con los dedos, y está bueno, dilata bien. La pongo en cuatro, ella se pone gel en la argolla, y le doy dos minutos (el famoso tsunami sexual de Aminobwana) y….¡ acabo como un pelotudo principiante!
Evidentemente no solo no traje mi diablo, no fui yo tampoco.

En la corte con la reina y su consorte
regalando colonias en las Indias.
Festejaban y en el pico de su pedo
me invitaban a azotar a unos esclavos.
En bolas los dos en la cama, había pasado media hora, de la cual de acción habrán sido diez minutos. Patético. Ella estaba tendida junto a mi, hablaba, se reía, atolondrada y fresca. Yo la acariciaba y bajo el ruido permanente del rotopercutor pensaba: que flor de pelotudo soy.
Intentó (creo que fue pura formalidad) invitarme de nuevo. Pero la mía fue una acabada tipo paja, donde a los dos segundos estás pensando en cualquier cosa.
Esta vez sin duda no puedo decir que ella se coloca o no en el encuentro. Es más si se calentaba con lo que yo hacía era una especie de milagro. Así que amigos, no puedo dar data al respecto.

En el baile me encontré a Satán
desnudo en una suite del Sheraton de Río.
Convidaban la belleza de sus chicas
que, excitadas, vivaban por orgías.
Con una voz chiquita, como pidiendo perdón me dijo “la pasé bárbaro”. Como ni ella se lo creía agregó: sos muy dulce, nada violento ni enérgico al pedo. Yo pensé “tipo una bolsa de fideos pasados”.
A los cincuenta minutos, me lavé la chota ausente y me fui. Ni ganas de fumar me dieron.

¿Qué carajo pasó entonces, pedazo de ridículo impresentable?
Repasando lo hecho, puedo decir que ya cuando elegí la pifié. Salí a corroborar algo que me importaba un carajo, pues si la dama no era la de las fotos, yo no me iba a enterar, porque no la hubiera elegido. Digamos que me enredé en algo pensando que de paso garcho.
Pero a esta altura de la soireé, tengo que elegir mejor, por ejemplo lo que a mi me gusta. Así de pelotudo soy.
Por dios.

Nuncagateo, desde Buenos Aires la ciudad de los ojos tan pero tan maquillados.

TABLITA DE LA EXPERIENCIA

Regalito: xxxx
Barrio: Palermo - paraguay y salguero
Es Completa: SI
Bucal: HTA EL FIN
Es Independiente: SI
Besos: Piquitos
Calificacion Gral: 7


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Cara: 7
Lolas: 8
Cola: 7
Cuerpo: 8
Onda: 8
Lugar: 6
Porcentaje photoshop: 5 %
Relojea?: No
Servicio: 8
Reinicidencia: No

FOTOS DE LA PUBLICACION

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