Palo y palo con Gisel - Tribunales - Hay fotos. bairesgirls

Fuí porque me la recomendó el colega Franzen.
"Recuperé mí fé en la prostitución" fué su sentencia después de conocerla.
Yo no le dí mucho crédito porque sé de su afición a los superlativos y el malbec, pero de todos modos fuí.

Cuando la ví, la impresión es que tiene cara de piba buena y copada del colegio, la que siempre toma apuntes, canta en el coro y organiza la colecta en el curso para las muletas del hijo del portero. Chica de colegio religioso de señoritas.
Obviamente, y como dicta el saber popular, esas son las peores.

Una piba linda con pinta de buena, pero con lencería hermosa de piba mala. Por ejemplo ese conjuntito en color borgoña que contrastaba hermoso en su piel blanca.

Yo no soy de besar y a esta altura hasta el pete me lo puedo saltear, pero no le hago asco si me los brindan. Más si el pete es medio desesperado y en cuatro. Al toque supe que clase de escort era. Pero que cada uno haga su exploración. Puedo decir que la agarré en cuatro y después de mucho tiempo (un cuarto de siglo?) me monté en leoncito, en ese culo mientras aplastaba su espalda contra el colchón con mis zarpas. Así estuvimos un rato hasta que el sudor empezó a chorrear entre mí pelvis y sus nalgas, su espalda y sus piernas. Me pidió salir y me hizo un pete urgente de espaldas al espejo. Hace mucho que no acabo así pero me pudo. Después se escupió la porquería sobre las tetas (hermosas), que chorreó y ella embadurno hasta su pubis y vaya a uno a saber hasta dónde.
Así se acostó y hablamos pavadas divertidas.
Atravesado y medio en la otra punta de la cama, mientras divagabamos agarré sus piecitos con las uñas divinamente esmaltadas y me hice una paja. La pija me daba saltos. "Está viva!" Exclamó el angelito. "Por suerte, si" contesté.

En el segundo acto me sebé en ese culo. Hay pocas escorts a los que se los haya comido, pero me pintó. Enseguida estábamos en cuatro otra vez (soy aburrido) y entre sus gritos y mis gruñidos de cerdo buscamos terminar el asunto. Pero estaba lejos el polvo y aunque medio se me salió la cadena no parecía que fuera a acabar. Se sale y me pide terminar a pete, la acuesto boca arriba y me monto sobre sus tetas y de repente estoy cogiendo su cráneo con ganas mientras doy con mi cabeza en la pared. Le agarro las manos y se las sostengo alejadas de mí tesorito. Acabo como un marrano. Me tiro en la cama y agonizo. "Nunca me habían hecho eso" me dice. Le sonrío al borde del aneurisma.

Corrimos la cama nuevamente a su lugar y me doy un baño en la ducha mortal, cuesta entrar pero más salir, jaja.

Ascensor, Güerrin, birra y adiós.

PD 1: Fuí 3 veces y todas fueron mejor que la anterior. Siempre de buen humor y con una predisposición única. Realmente me hizo recuperar la fé, también.


PD 2: En una de las visitas mientras me hacía un pete frente al espejo y su culo se sacudía en la penumbra, me dije: Tengo que registrar ésto.
Así que tengo 2 o 3 fotos trankis de su culo sudado y hermoso, después de un sesión intensa.

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