Comentarios sobre Escorts/Acompañantes en BairesGirls

[b:6043e5f43b]Luego de una larga ausencia en Buenos Aires, hemos vuelto a degustar de las bondades de las mujeres argentinas.
La experiencia que les relato data de unos días atrás.En este caso fuí a visitar a la Princesa Dominique, a quien no veía de hace mucho tiempo. La llamo y le digo que ando cerca y me dice venite yá, que esperás, de inmediato me apersoné en su dpto de Juncal al 800.
Me recibió como es costumbre, realmente nos conocemos de hace mucho tiempo y cada vez que nos encontramos se produce una química nuy especial, por eso tal vez resulte un poco parcial mi relato.
Ni bien crucé la puerta se abalanzó y me pegó una apretada contra la puerta inolvidable, donde no hicieron falta las palabras y solo entregarse a semejante momento.
En cuanto me dí cuenta, estaba en pelotas arriba de la camilla que está frente a la cama regalándome un petinato de novela, hasta que logré tomar el control de la situación y devolver la gentileza metiendo lengua y manos por cuanto agujero andaba por ahí, luego pasamos a un 69 donde me sacó el primer polvete con su boquita.

Ambos nos higienizamos, puchito por medio, algo de tomar, y hablamos un poco de nuestras cosas, de lo que nos pasó durante este tiempo, y nuevamente al ataque me comenzó a besar todo el cuerpo hasta llegar a visitar al amigo y zonas aledañas, black kiss incluídos los que fueron devueltos de mi parte sin dejar de pasar por esas hermosas lolas hasta que preparé el campo de acción y le entré por atrás, primero suavemente hasta que al pedido de Domi, de rompeme toda, le entré a dar más ritmo y estocadas más profundas, como algún sabio poeta dijo "tremenda orteada" donde dejé varios de mis descendientes, quedamos exaustos en la cama, y cuando logré recuperar fuerzas me fui a bañar con la tarea cumplida, eso creía yo, ya que al salir del baño secándome me empezó a acariciar nuevamente me empujó a la cama y me empezó a petear de nuevo, pensé que el amigo no respondería, pero que lindas sorpresas te dá la vida, se me subió y me pegó una cabalgata con cambios de ritmo, y me decía te tenías que ir, que lástima yo sigo calentita, y asi fue que me dejo seco hasta sacarme la última gota que me quedaba, y me dijo asi te volvés a casa bien sequito.

Que les puedo decir de esta princesa, la verdad me sorprende cada vez que nos encontramos. Esta vez como nunca me sacó tres (alta performance) en una hora y media.

Bueno con el deber cumplido y destruido me retiré, dejando el regalito sobre la mesa.

Un abrazo a los colegateros y hasta la próxima.

Graduado

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