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Miércoles 4 de abril de 2007


[b:a53aace92c]Puede tener efectos negativos en el bebe en gestación[/b:a53aace92c]

[size=18:a53aace92c][b:a53aace92c]En el embarazo, nada de alcohol[/b:a53aace92c][/size:a53aace92c]

[b:a53aace92c]Según un estudio de investigadores de La Plata, incluso niveles bajos pueden generar malformaciones
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¿Cuál es el límite máximo de bebidas alcohólicas que puede ingerir una embarazada sin perjudicar a su bebe?

"Realizamos un estudio en el que comparamos recién nacidos, hijos de mujeres que habían hecho un consumo leve de bebidas alcohólicas durante el embarazo, con bebes de mujeres que no habían bebido alcohol. Encontramos que entre los niños del primer grupo había mayor número de malformaciones leves y más casos de baja vitalidad al nacer que en los chicos del grupo no expuesto al alcohol", afirma la médica Silvina Morales, integrante del Instituto de Investigaciones Pediátricas del Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata (IDIP), un centro de la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CIC).

Entre noviembre de 2004 y marzo de 2006, Morales (becaria del Ministerio de Salud de la Nación) entrevistó a embarazadas que concurrieron al Servicio de Maternidad del Hospital General San Martín de La Plata. También examinó a sus bebes al nacer y 48 horas después del parto y determinó su estado de salud.

Las conclusiones de la investigación fueron publicadas en la revista especializada Pediatric Research .

[b:a53aace92c]Cómo fue el estudio[/b:a53aace92c]

El vino, la cerveza y los licores contienen alcohol etanol en cantidades que determinan su graduación alcohólica. La del vino es aproximadamente 14, lo que significa que 100 centímetros cúbicos contienen 14 centímetros cúbicos de etanol puro. En el mismo volumen de cerveza hay aproximadamente 7 centímetros cúbicos de etanol.

Como el estudio quería establecer los efectos de consumos muy bajos, se descartó a las madres que habían ingerido más de 700 centímetros cúbicos de etanol por trimestre de embarazo. Esta cantidad de alcohol está muy por debajo del límite fijado por la Organización Mundial de la Salud para considerar que una mujer es alcohólica (70 centímetros cúbicos de etanol por día).

Asimismo se excluyó del estudio a las madres fumadoras, a las que habían consumido algún tipo de drogas, a las enfermas y a las que tenían antecedentes familiares de malformaciones genéticas, factores que pueden influir en el desarrollo del bebe en gestación.

La investigación encontró que el 66% de los bebes de madres que ingirieron etanol durante el embarazo (79 mujeres) presentaban malformaciones faciales leves, en comparación con sólo el 16% de los hijos de las que no lo consumieron (100 mujeres).

Entre las malformaciones podían encontrarse el mentón retraído hacia atrás (retromicrognatia), la nariz más corta o bien una alteración en la altura de implantación de las orejas o en su forma. Asimismo, los bebes del grupo expuesto al alcohol materno tenían también mayor probabilidad (el 11%) de tener una baja vitalidad al nacer (medida con la escala pediátrica Apgar) en relación con los niños no expuestos (el 2%).

Por otra parte, no había diferencias significativas en los valores promedio de peso, longitud y de circunferencia de la cabeza entre los bebes de ambos grupos.

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El alcohol ingerido durante el embarazo llega hasta la sangre del bebe, que es incapaz de metabolizarlo [/i:a53aace92c]

[b:a53aace92c]Efectos del consumo leve[/b:a53aace92c]

Los hijos de madres alcohólicas pueden tener alteraciones cardiovasculares, pero... ¿afecta al sistema circulatorio del bebe un consumo leve de bebidas alcohólicas durante el embarazo?

Buscando respuestas, la doctora Morales cortó una porción del cordón umbilical de los niños nacidos por parto natural y extrajo su arteria. En la Cátedra de Fisiología de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata, la doctora María Florencia Iveli determinó la capacidad del músculo de las arterias para contraerse cuando se las estimula con agentes vasoactivos como la serotonina.

Las arterias umbilicales de los bebes expuestos al etanol mostraron contracciones 60% más bajas en promedio que las del grupo no expuesto, aunque al examinarlas microscópicamente no se observaron diferencias apreciables de estructura y forma.

"La menor contractilidad de las arterias umbilicales puede ser un indicio de que las células del sistema vascular del bebe están afectadas por el etanol", explican los directores del trabajo, la doctora Verónica Milesi y el doctor Alejandro Rebolledo, investigadores del Conicet y de la Cátedra de Fisiología de la citada facultad.

"Los cambios funcionales en los vasos del cordón podrían alterar el flujo de sangre entre el feto y la placenta, afectando el desarrollo de los órganos fetales."

El etanol que ingiere la embarazada pasa a la sangre del niño. Como su sistema metabólico es inmaduro, no puede metabolizarlo bien. Además el alcohol atraviesa la placenta y llega al líquido amniótico, permaneciendo allí aún después de que ha desaparecido de la sangre materna.

"A las células no les hace bien crecer en un medio que contenga etanol. El feto es especialmente frágil en el primer trimestre de gestación, que es cuando se forman órganos y sistemas. Por ello aconsejamos que las mujeres que sospechan que pueden estar embarazadas, o que buscan estarlo, suspendan el consumo de todas las bebidas alcohólicas. Nuestros resultados corroboran las recomendaciones de las organizaciones de salud de abstención de alcohol durante el embarazo", subraya la doctora Milesi. Quienes deseen más información, pueden encontrarla en el sitio www.biol.unlp.edu.ar/ginfiv .

CIC-CyT

Por Irene Maier
Para LA NACION

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