Off-Topics / Fuera de tema

Durante la revolución francesa, la gran mayoria de los liberales y libertinos fueron, primero, moderados (girondinos); y, despues de que Robespiere instaló el terror, francamente contrarrevolucionarios. Las prostitutas "libertas" (ver: gatos raros II) se habian vuelto sorpresivamente monarquicas, tras las "masacres de septiembre" (de 1792), donde muchas de sus colegas fueron violadas y asesinadas por los revolucionarios jacobinos.

en 1794 estalló una contrarrevolucion en el este de Francia, en la region de La Tendé (bautizada ironicamente "revuelta de los tenderos"). allí, una adolescente llamada Lucile (¿nombre de batalla? vaya uno a saber. como sea: no se sabe su apellido) se acercó a los monarquicos: mitad para darles ánimo; mitad para hacerse unos mangos. se encontró con que la prostitucion es un buen negocio...si una se encama con los que van ganando. pero los tenderos tenian más hambre que ella. se quedó ya más por furor monárquico, más que por otra cosa: durante el día, se la pasaba acarreando agua; por la noche, si tenia suerte, se hacia alguna changa por unas monedas.
el lider de los tenderos (no recuerdo su nombre) se interesó en ella y la instaló en su casa como su compañera. y se interesó tanto...que cuentan que llegó a dirigir una batalla desde la cama: sin dejar de fifar con Lucile.
el asunto es que, despues de algunas derrotas, los jacobinos retrocedieron; y el tipo tenia que avanzar: dejando La Tende. pero no queria abandonar a Lucile; y no podia tampoco oficialiaqla como[i:1882cceb24] su nada[/i:1882cceb24]; porque era casado; asi que hizo algo que demuestra que era un hombre sensato y prudente: la nombró general.
a los pocos dias, Lucile entró en combate: no sabia un corno de estrategia; pero resultó ser muy valiente, lo cual daba ánimos al resto; que no querian ser menos que una chica. los tenderos ( alos que, por lo visto, les gustaban las ironias) la bautizaron "la doncella de La Tende". Lucile obtuvo un par de victorias; pero los jacobinos los superaban muchisimo en número, y al final la revuelta fue aplastada y Lucile capturada.
el general enemigo (tampoco recuerdo su nombre) no podia creer lo que veia, cuando Lucile se acercó a entregarle su sable. El tipo se comportó como un caballero con ella: la llevó personalmente a su calabozo y ordenó a los guardias que la trataran "como correspondia a su rango militar". por la noche, se ocúpó de que se "olvidaran" la puerta abierta. al otro día, para su sorpresa, la encontró en la celda: sentada en la cama rezando.
Resignado, la llevó al paredón y la hizo fusilar. tenia 15 años