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[b:141b6204e0]Técnica Secreta para el Masaje de Huevos[/b:141b6204e0]　

Bueno, hoy te vamos a enseñar el difícil arte de masajear los huevos.



Historia :wink:
Dicen que el arte de masajear los huevos viene del Imperio Chino. Las chinitas CF se entrenaban usando terrones de azúcar con forma de testículo, y los frotaban evitando que se desarme. Las chinas más hábiles incluso podían mojar un testículo de azúcar en un café y sacarlo sin que se derrita. Luego el arte pasó en manos de los japoneses, que lo refinaron y lo llamaron "Tamago-Do" (el camino del huevo), en donde las mujeres guerreras creían que los huevos eran tan delicados como el corazón de un guerrero samurai y tan vitales para la humanidad como la lucha por la paz. "Conoce los testículos de tu enemigo y te conocerás a ti mismo".



[b:141b6204e0]Introducción[/b:141b6204e0] :roll:

Bueno, antes de empezar veamos un poco de anatomía. Los testículos son como dos bolas envueltas en una piel llamada escroto (que puede estar endurecida o relajada, pero tiene que ver más con la temperatura que con el placer). Le llamamos "huevos" a esa parte, las bolitas, no la piel que las recubre. La piel se puede estirar, pellizcar e incluso cortarla y hacerte una campera, pero los huevos son delicados y merecen un manejo muy cuidadoso.

Decirte que los huevos son como dos bolas de vidrio sería muy desacertado, porque son muchísimo más delicados que eso. Los huevos no sólo duelen cuando los golpeás, también duelen si los frotás mal (peor si los frotás entre si, porque nos producen doble dolor). Expresiónes como "se me subió un huevo" representan el dolor de la mala frotación, que sería cuando un huevo está junto al otro pero más abajo, y por acomodarse las piernas (ej: al cruzar las mismas), el huevo que está abajo pasa arriba bruscamente. Eso duele, menos que un impacto pero duele.

Como te imaginarás, es una parte MUY sensible. No despierta demasiado placer que te toquen ahí, así que si estás muy insegura podés pasar de eso. Pero si te atrevés, podés llegar a lograr unos puntos extras a la hora de hacer un trabajo manual u oral (sólo si lo hacés bien, sino vas a restar puntos...y espermatozoides).



[b:141b6204e0]Vayamos al huevo.[/b:141b6204e0] 8)

Bueno, antes vamos a hacer una prueba. Agarrá una moneda de 25 centavos y tirala aproximadamente a 15~20 cm sobre tu mano. Bueno, un impacto así ya duele un poco en los huevos (si pega de lleno). ¿Sorprendida ? imaginate un pelotazo o una patada. Igual hablamos del golpe, porque apretar con esa fuerza no duele (igual no aprietes). Ok, por lo menos hasta acá aprendiste como defenderte de un agresor masculino y que tenés que ser muy cuidadosa cuando acerqués tu mano ahí.

Tené en cuenta que es mejor que no apretés de los lados de los huevos, no porque duela, sino porque vas a provocar que los huevos se toquen entre sí y corrés el riesgo de que haya una "subida de huevo" al masajear, como explicamos anteriormente. Por el resto, masajeá muy suavemente y por debajo, haciendo movimientos circulares o verticales (repetimos: suavemente, recordá lo de la moneda). Podés empezar utilizando nada más que la yema los dedos (sin el pulgar) y si te tenés más fe, usar la palma de tu mano. Tambien te sugerimos acariciar los bordes (donde nace el escroto, en los costados) ¡Con un poquito de práctica vas a conseguir ese punto extra y la dominación total de las pelotas !




[b:141b6204e0]HOUSTON TENEMOS UN HUEVO ROJO[/b:141b6204e0] :evil:

¿Cómo te das cuenta de que lo hiciste mal ? Bueno, si tenés una pareja sincera te va a soltar un grito como el de Tarzán pero con una mosca atragantada, pero si no es así y tu pareja se traga el dolor con tal de no hacerte sentir mal, podés advertir algunos síntomas, como mordeduras debajo de los labios, cejas fruncidas al mango, sangrado en las orejas, etc. Si tu pareja empieza a aplaudir y a toser, soltale los huevos porque le estás asfixiando la piiiiiiiii.........