Política y Economía

No fueron López Rega ni Isabel quienes rechazaron la idea. Luego de la muerte de Perón, la presidente María Estela Martínez de Perón le encomienda a Massera y a su ministro de RREE iniciar los contactos vía cancillería para acordar el Plan Dos Banderas. El intermediario sería el embajador en España.
Pero la interna de la Marina pudo más. Massera le ofrece a Isabel la ocupación militar de las islas y negociar la entrega de las Malvinas con los ingleses.
Hay una frase de Isabel de la que fue testigo su secretario privado Dr Julio Gonzalez (ver "Isabel Perón, intimidades de un gobierno"Editorial Ateneo 2007. La historia argentina de aquellos años trágicos va escribiéndose lentamente. Hay acontecimientos suficientemente investigados (el terrorismo civil y el terrorismo militar), pero también otros que aun esperan mayores y más completos desarrollos.
El libro de Julio GONZÁLEZ aborda, precisamente, uno de esos momentos donde los estudios históricos pueden calificarse de aún insuficientes. Y lo hace, por supuesto, con la intención de referir sus memorias, de hacer públicos acontecimientos y sucesos de los que él mismo fue testigo directo, pero no con la de elaborar un ensayo con pretensión científica.
Comenta Gonzalez que, ante la propuesta de la Marina, la presendenta le contesta: "¿Está usted loco? No voy a permitir que las madres argentinas digan en el futuro que la presidente Perón les mató a sus hijos".
A partir de ese momento y despechado, Massera comienza a participar de las reuniones en el edificio Kavanag, 4º piso, donde se domicilia el Dr Martínez de Hoz. Participan, demás del marino, los representantes de la Shell, la Esso, la Italo (M. de Hoz era su presidente), la Siemens y la ITT.
Las mismas empresa que habían derrocado, años antes, a Allende en Chile, estaban confabulando para un nuevo golpe militar. (Ver "Los Cipayos y la Entrega", Editorial Línea, 1982).

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