Visitando a Donna Lia bairesgirls

La xp es de la última escapada a CABA, de hace ya unos cuántos días atrás. Como hay mucha info de ella, trataré de ser breve y dar mi punto de vista.

Coordinar fue fácil, respondió rápido y con buena onda, arreglé con tiempo como suelo hacer. Ese día ella arrancaba después de las 19 hs, así que me vino de diez: salir de una reunión e ir a coger ya es como mi rutina en la ciudad de la furia.

Llego al edificio, a una cuadra del shopping, toco portero y baja. Sin personal que moleste o pida DNI, no se puede pedir más. Primera impresión es buena, aunque la imaginaba más bonita de cara, mambos que uno se hace mirando sus fotos y leyendo xp. De todas formas, no me pareció fea, sino normal. Lo que vi del cuerpo en ese momento me gustó, bajó discreta en realidad. Subimos a su depto, todo ordenado y limpio, me dio una toalla y pasé al baño a higienizarme un poco, la verdad es que todavía estaba limpio y perfumado, así que no me duché nuevamente, además el tiempo (maldita daga) era escueto.

En la acción, empezamos charlando trivialidades y luego a los besos, que fueron subiendo de tono. Voló la ropa de ambos. Ella tiene una linda figura, con tetas tamaño normal, más bien tirando a pequeñas, una cintura marcada y un culo grandecito y bastante duro, no le falta ni le sobra nada, no es fitness ni fofa. En general, me gustan más delgadas, pero el cuerpo de Lía es una delicia, me gustó demasiado para no ser mi ideal.

Ya acostados en la cama comencé a masturbarla mientras le chupaba las tetas y chapábamos, tiene un bigotito en la pelvis que le queda de maravillas. Comenzó a mojarse, así que mientras gemia continué saboreando sus pechos hasta que ella tomó mi pija (ya super dura) y comenzó a masturbarme. Me acomodé en la cama y le pedí que baje a chuparla, estuvo casi 20 minutos comiendo mi verga de todas las maneras posibles: lamidas al tronco y huevos, succionaba con fuerza la cabeza, frotaba sus labios por el tronco, y en pose similar al 69 (no le chupé la chuchi, no es lo mío) me mostraba cómo le entraba toda en la boca, aprovechando también para cogersela un poquito. Realmente un buen pete, en el que hizo todo lo que le pedí. Gauchita.

Enfundo y se me sube a cabalgar de frente, mientras me daba besos y también continuaba chupandole las tetitas, que a esa altura estaban con los pezones duros. Aproveché para colarle un poquito un dedo en el culo, que denota un frondoso prontuario.
Cambiamos de posición, en 4 a pedido de ella. Tiene un espejo en la cabecera de la cama al que acudía cada tanto a mirarme para bajar la excitación, ya que darle bomba en esa posición, mirando como ese culo rebota y rebota, invita a acabar rápidamente.

Le di bomba un ratito más, ella gemia, yo transpiraba y subía una pierna a la cama para darle estocadas a fondo, su vulva carnosa estaba muy húmeda y recibía la pija gustosamente. A diferencia de otras ocasiones, no percibí ningún olor molesto. Pocos instantes después fue inevitable acabar en el latex, ya se había pasado la media hora por la que había acudido. Luego pensé por qué no le di la leche en la boca, pero bueno, quedará para la próxima visita, si me lo permite.

Luego de higienizarme y darle su regalito, Lia me acompañó hasta la calle, me dijo cosas lindas y yo a ella, prometiendole volver a visitarla en mi próximo viaje. Unos minutos después, mientras pateaba hacia el hotel, recibí un mensaje de ella diciéndome que la había pasado lindo y que me esperaba la próxima. Siempre me gustan esos detalles.

Pasando en limpio, Donna Lia es una paraguayita bella con mucho oficio, piola, independiente, maneja horarios muy buenos para los que trabajamos por la tarde, es super buena onda e hizo todo lo que le pedí. Sin dudas volveré a garcharla en mi próxima parada en la city porteña.

Espero que les sirva, les mando un gran saludo.

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