Escort Lola MP - Microcentro - Trio con Mili MP en la Hermandad de Suipacha

Los gustos en vida, muchachos. Sueldo todavía fresco, promisorio aguinaldo e inminente cumpleaños fluctuaron para que se diera el dichoso y condiciado trío con las hermanitas.

INTRODUCCIÓN: La cita se dio ayer 10-12 cerca del mediodía. Arreglé con 48hs de anticipación con Lola y le pedí que le avise a su hermana (en su speech no lo menciona, por eso pregunté si seguía vigente ese servicio). Cero drama, me agenda. La Fantasia y el Morbo comenzaron a hacer lo suyo. Con Mili tengo una larga relación cliente/escort, pero con Lola, tan solo un muy buen encuentro. Con lo cual, la complicidad y hasta el hecho de sentirme cómodo en estas situaciones algo tumultuosas, me daban plena garantía.

NUDO: Debido a los avatares del transporte público, llego con 10 minutos de retraso. Aviso, me dan el OK e ingreso como pancho por mi casa. Piso, timbre, puerta que se abre y la sonrisa de Lola de par en par. Pantuflas de Mickey y camisón negro, tierna y casual. Mili ni idea, ¿le habrá dicho? Me desvisto raudamente. Paso al baño semi desnudo a cumplir con el protocolo higiénico. Al volver a la habitación, que por suerte tiene AC, ya me esperaban ambas en la cama. Uffff... Mili, a la cual no visito hace un tiempo, tenía un conjunto de lencería roja que le quedaba un infierno. ¿Sabías que era yo el que venía? "Si si, le pregunté a mi hermana con quien era el encuentro y me dijo que 'con el flaquito tatuado' jajajaa". Todo muy familiar por acá. Repasamos las condiciones. Lesbianismo obviamente. Lola se hizo las ídem, y por tanto, su desempeño iba a estar diezmado. Concordamos. "Vení, acostate en el medio". Qué decirles, quería tener mil brazos, mil lenguas y por lo menos tres pitos más. Besos pasionales de ambas. Beso a Lola, Mili me petea. Beso a Mili, Lola hace lo propio. Mili estaba con un temita en su vulva y no se le podía comer el chocho. Maldita sea, con lo que me gusta ese chochito gordo y jugoso. Le hacemos bullying a Mili porque se quemó mal por el sol con una marca ridícula. ¡¿Pero a qué vine?! Ah, si. Lola, acostate que te voy a comer el chocho. "Ay, pero no sé si voy acabar con mi hermana acá" jajajaa. Lo intento, lengua karateka, dedos que ayudan al estímulo y en eso escucho "¿querés que te chupe el culito?". Manejate Mili. Para qué... me succionó el ano como nunca. Chupada de huevos, de pija, lengua profunda, yo estaba lívido. Tremendo. Misionero con Lola despacito por sus nuevas incorporaciones. ¿Querés verlas? Me las muestra. Son divinas, les doy unos besitos. Cambiamos de forro; ahora Mili en cuatro. Qué espectaculo maravilloso. La hago subir mientras me sigo besando con Lola. En eso, miro mi reloj y quedaban 15 minutos. Qué lo parió, ya fue, paremos acá. Me sacó el forro y Mili se ofrece a voluntad para liquidar el pleito. "Mirá Lola, fijate cómo trabaja tu hermana en su fuerte". Lo sé! Asevera la hermana menor. Nos damos besitos tiernos con Lola "te hago mimos?" Y daaaale. Mientras que por la Zona Sur, Mili despliega todo repertorio peteril: Escupidas, GP, golpecitos de chota en la lengua; toda una Masterclass. Le indico a Lola que se prepare para el Grand Finale. La abrazo fuertemente y juntos vemos cómo el volcán seminal dispara proyectiles a diestra y siniestra. Me disculpo. Entre los tres cambiamos las sábanas.

DESENLACE: A los que buscan tríos lésbicos o más participativos, no es por acá. Los que quieran ir por el morbo de estar con dos hermanas, vayan con tranquilidad. Y para los que ya estuvieron con algunas de las dos, reincidan. Mi tiempo neto de sexo habrá sido de 15 minutos, como mucho. El resto fueron interacciones lúdicas que se fueron generando en complicidad con dichas hermanas, a las cuales quiero, respeto y siempre las voy a tener en consideración. Quedamos en repetir el evento pero por 2hs y con birras de por medio. Porque al final, lo que más importa, en la Familia.

Besos y abrazos!
Felicidades,
Z.-

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