Hoy no deseo extraordinarias aventuras. La ficción la escondí bajo la alfombra.
Lo narraré simple, porque acabo de vivir una hora quince minutos extraña y placentera.
Es muy difícil que, a mi edad, sea un explorador de gatitas misteriosas.
Sin embargo, en mi barrio laboral (Tribunales) suelo ver felinas raídas con años de calles y bulos.
O despampanantes principiantes de atrevidas intenciones obscenas.
Y expertas de petes varios y colas mil veces perforadas, con ínfulas de extravagante vedette del Maipo.
Hay de todo.
Pasan frente a mi y ya juno cual es su dossier.
Tengo un radar maldito que cachetea mis neuronas cuando detecta las ninfas picaronas de prehistórica profesión.
Por eso, cuando descubro una sonrisa fresca de mirada insinuante, ambas cosas encaramadas en un rostro adolescente con destellantes ojos celestes, no pude menos que conmoverme.
Y esto, (sin dar lugar a fábulas pérfidas y/o cargadas de los amigos foristas), con la mochila llena de recuerdos y viejas fotos, que mi frágil memoria ha acumulado durante años, para que el peso de mi ataúd (final ineludible de todo ser humano) sea tan pesado por acumulación de historias, como pesado será el solitario infeliz que va dentro.
Dice llamarse Briza. El nombre no le calza.
Pero es, una Briza. Así, mal escrita. Un suave viento de primavera, en este otoño que se anuncia gris y frío.
Y lo es por su juventud, simpatía y actitud.
El departamento es pulcro y cómodo.
Muy pocas veces se halla uno con un PV de habitaciones en suite, limpias, ordenadas y adornadas con flores auténticas.
Me recibió con un beso. La tomé de la cintura y volvió a besarme, esta vez en la boca.
-¿Así que vos sos el fa
?
-¡¡Shhh!!, las paredes tienen orejas
le tapé la boca con una mano.
Me invita ingresar a la habitación. Viste un camisón corto, negro transparente. Debajo, un conjunto rojo fuego.
Es baja, entre 1,65 y 1,67 metros. Pechos naturales y cola paradita, de quinceañera.
Luego de pasar al baño, donde hay todo lo necesario para una correcta higiene, la encuentro en posición perrita sobre la cama, contrastando su conjunto rojo con el sedoso blanco de la colcha.
Se acerca con pasos gatunos y comienza a desvestirme (mejor dicho, a sacar los últimos trapos que me cubrían).
Sus manos son dos alas que recorren mi piel.
Unos labios calientes se aplastan sobre los míos y su lengua lujuriosa hurga mi paladar con curiosidad.
Comienzo a besar su cuello. Se le eriza la piel. Es la puerta de entrada al turismo de mis labios por sus hombros, hasta bajar a dos pechos perfectos, naturales, a los cuales liberé del opresor soutiens.
Degusté los pezones y los acaricié con la lengua durante un rato. (¿Tal vez tres o cuatro minutos?).
No lo sé. El placer de chupetearlos y lamerlos fue atemporal.
Mientras Briza me acariciaba el cabello bajé lentamente, brindándole decenas de besos, hasta su sexo. Acostó el cuerpo sobre la cama y abrió las piernas con delicado movimiento. Me ofreció su vulva.
Tiene la vagina pequeña. Abrí los labios con mis dedos e introduje, libidinoso, la lengua buscando el contacto con el clítoris.
Cuando lo atrapé y agité, reaccionó como torturada con una picana eléctrica.
Cruzó las piernas sobre mis hombros y quedamos en la posición ideal para que la masturbe con toda la artillería bucal que mi experiencia delata.
Así el reloj comenzó a funcionar para atrás. Los objetos que nos rodeaban volaban en giros alucinados alrededor de nuestros cuerpos.
No existía historia. No había pasado. Ni siquiera pluscuamperfecto.
El presente estaba allí, paralizado en un acto íntimo de placer femenino, mientras los jugos salían intrépidos de ese refugio de candor y explosivos orgasmos.
Sin tregua. Sin ninguna tregua.
Hasta que abrió los brazos, bajó las piernas y la observé agitada, buscando recuperar el aliento.
¿Cómo contar ese instante sin cometer el adulterio de palabras no buscadas?
¿Cómo describir la escena de esa blanca colcha que anidaba un ser impoluto, hembra rubia de piel pálidamente tostada, acostada desnuda, frente a mi?
¿Cómo no sentir ternura ante una escena semejante que impactará mi ser con su recuerdo, por los días de los días?
Maldije no haber llevado una cámara para registrar la deidad del momento.
Y fue allí.
Fue de improviso.
Sin anuncio preparado.
Atrapó con sus manos el miembro. Lo mojó con lengua y saliva hasta que consiguió la rigidez máxima y mamó de él sin tener urgencias famélicas.
Fue placentero. Una lengua sutil y mojada giraba alrededor del glande y, luego, dos labios juveniles lo hacían desaparecer. Una y otra vez.
Una y otra vez.
Perforando esa boca delicada de dientes perfectos que hubiera preferido besar eternamente.
Cuando notó mi agitación se anticipó a la descarga y lo encapuchó con una velocidad profesional.
Me atrajo hacia ella y logró la penetración deseada. Las piernas de Briza, a mi espalda, ejecutaban el abrazo de la boa y sus ondulantes movimientos se amoldaban a los míos mientras los suspiros nacían de ambas bocas.
Tomó sus senos y comenzó a amasarlos.
La vagina, de tan apretada, asemejaba el bucal previo que alucinó mis sentidos.
No pude contenerme. En el último estertor de mi éxtasis, ella explotó como un diapasón golpeado por una masa. Por segundos de diferencia ambos orgasmos no fueron un gran orgasmo compartido.
Sin embargo, nada mío quedó en el tintero.
A pesar de frescor otoñal del exterior, estábamos tan transpirados como si hubiésemos corrido la maratón de San Silvestre.
Y en realidad lo hicimos.
Sin inhibiciones ni pudor.
Fue una verdadera maratón de sexo y placer.
Al salir a la calle, después de tanto glamour sexual, el frío me transportó temporalmente al hoy del calendario.
Pero los recuerdos del instante vivido me persiguieron, hasta mi morada familiar.-
Total.esunratito
http://altoserver.com.ar/altosite/altos01/3972/book0.htm
Gif: 100 media hora, 150 la hora convencional (completo se arregla en el momento, yo no hice uso porque fue todo 10 puntos)
Lugar: Lavalle al 1800, pasando Callao.
Lugar: Muy bien instalado y con todo lo necesario.
Cuerpo: 10 (juvenil) Es ella, sin trucos fotográficos.
Cara: 9
Actitud: 10
Simpatía: 10
¿Reincidencia? Sin dudas. E iré por un dúo con la profe.
FELICITACIONES TOTAL X LA XP :wink:
SE LA VE MAS QUE APETECIBLE A LA NEA :twisted:
[img:8cbdee785c]http://altoserver.com.ar/altosite/altos01/3972/foto02.jpg[/img:8cbdee785c]
No escribo en xp por pudor o respeto pero no puedo
mas que felicitarte no solo por tu encuentro,sino por
tu forma tan poetica y dulce de relatarla.
Sos un genio!!!Te doy mi mas por tu poesia!!!
alexia
Que pedazo de nena te comiste, Total..!!!!
Que Alexia se deleite con tu prosa, que yo me deleito con la foto!!! :twisted:
Felicitaciones.
Un abrazo :wink:
felicidades por la xp total.esunratito :lol: :twisted: :twisted:
16/05/2009 20:43Hermosa!!!!! Felicitaciones!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
16/05/2009 21:27Una vez mas me sorprendes la facilidad de palabra.....tenes que escribir un libro !
16/05/2009 21:42Felicitaciones por la Xp, exelente relato.
Saludos.
[size=18:1f57f51f70][color=olive:1f57f51f70]Felicitaciones Total,
que linda pendex te devoraste
muy buena data
un abrazo
Lito[/color:1f57f51f70][/size:1f57f51f70]
[b:05953c4ec4]FELICITACIONES Y GRACIAS POR LA DATA!!!
SE LA VE LINDA A LA NENA!!![/b:05953c4ec4]
:wink:
[quote:27d0fad5ac="total.esunratito"]Hoy no deseo extraordinarias aventuras. La ficción la escondí bajo la alfombra.
Lo narraré simple, porque acabo de vivir una hora quince minutos extraña y placentera.
Es muy difícil que, a mi edad, sea un explorador de gatitas misteriosas.
Sin embargo, en mi barrio laboral (Tribunales) suelo ver felinas raídas con años de calles y bulos.
O despampanantes principiantes de atrevidas intenciones obscenas.
Y expertas de petes varios y colas mil veces perforadas, con ínfulas de extravagante vedette del Maipo.
Hay de todo.
Pasan frente a mi y ya juno cual es su dossier.
Tengo un radar maldito que cachetea mis neuronas cuando detecta las ninfas picaronas de prehistórica profesión.
Por eso, cuando descubro una sonrisa fresca de mirada insinuante, ambas cosas encaramadas en un rostro adolescente con destellantes ojos celestes, no pude menos que conmoverme.
Y esto, (sin dar lugar a fábulas pérfidas y/o cargadas de los amigos foristas), con la mochila llena de recuerdos y viejas fotos, que mi frágil memoria ha acumulado durante años, para que el peso de mi ataúd (final ineludible de todo ser humano) sea tan pesado por acumulación de historias, como pesado será el solitario infeliz que va dentro.
Dice llamarse Briza. El nombre no le calza.
Pero es, una Briza. Así, mal escrita. Un suave viento de primavera, en este otoño que se anuncia gris y frío.
Y lo es por su juventud, simpatía y actitud.
El departamento es pulcro y cómodo.
Muy pocas veces se halla uno con un PV de habitaciones en suite, limpias, ordenadas y adornadas con flores auténticas.
Me recibió con un beso. La tomé de la cintura y volvió a besarme, esta vez en la boca.
-¿Así que vos sos el fa
?
-¡¡Shhh!!, las paredes tienen orejas
le tapé la boca con una mano.
Me invita ingresar a la habitación. Viste un camisón corto, negro transparente. Debajo, un conjunto rojo fuego.
Es baja, entre 1,65 y 1,67 metros. Pechos naturales y cola paradita, de quinceañera.
Luego de pasar al baño, donde hay todo lo necesario para una correcta higiene, la encuentro en posición perrita sobre la cama, contrastando su conjunto rojo con el sedoso blanco de la colcha.
Se acerca con pasos gatunos y comienza a desvestirme (mejor dicho, a sacar los últimos trapos que me cubrían).
Sus manos son dos alas que recorren mi piel.
Unos labios calientes se aplastan sobre los míos y su lengua lujuriosa hurga mi paladar con curiosidad.
Comienzo a besar su cuello. Se le eriza la piel. Es la puerta de entrada al turismo de mis labios por sus hombros, hasta bajar a dos pechos perfectos, naturales, a los cuales liberé del opresor soutiens.
Degusté los pezones y los acaricié con la lengua durante un rato. (¿Tal vez tres o cuatro minutos?).
No lo sé. El placer de chupetearlos y lamerlos fue atemporal.
Mientras Briza me acariciaba el cabello bajé lentamente, brindándole decenas de besos, hasta su sexo. Acostó el cuerpo sobre la cama y abrió las piernas con delicado movimiento. Me ofreció su vulva.
Tiene la vagina pequeña. Abrí los labios con mis dedos e introduje, libidinoso, la lengua buscando el contacto con el clítoris.
Cuando lo atrapé y agité, reaccionó como torturada con una picana eléctrica.
Cruzó las piernas sobre mis hombros y quedamos en la posición ideal para que la masturbe con toda la artillería bucal que mi experiencia delata.
Así el reloj comenzó a funcionar para atrás. Los objetos que nos rodeaban volaban en giros alucinados alrededor de nuestros cuerpos.
No existía historia. No había pasado. Ni siquiera pluscuamperfecto.
El presente estaba allí, paralizado en un acto íntimo de placer femenino, mientras los jugos salían intrépidos de ese refugio de candor y explosivos orgasmos.
Sin tregua. Sin ninguna tregua.
Hasta que abrió los brazos, bajó las piernas y la observé agitada, buscando recuperar el aliento.
¿Cómo contar ese instante sin cometer el adulterio de palabras no buscadas?
¿Cómo describir la escena de esa blanca colcha que anidaba un ser impoluto, hembra rubia de piel pálidamente tostada, acostada desnuda, frente a mi?
¿Cómo no sentir ternura ante una escena semejante que impactará mi ser con su recuerdo, por los días de los días?
Maldije no haber llevado una cámara para registrar la deidad del momento.
Y fue allí.
Fue de improviso.
Sin anuncio preparado.
Atrapó con sus manos el miembro. Lo mojó con lengua y saliva hasta que consiguió la rigidez máxima y mamó de él sin tener urgencias famélicas.
Fue placentero. Una lengua sutil y mojada giraba alrededor del glande y, luego, dos labios juveniles lo hacían desaparecer. Una y otra vez.
Una y otra vez.
Perforando esa boca delicada de dientes perfectos que hubiera preferido besar eternamente.
Cuando notó mi agitación se anticipó a la descarga y lo encapuchó con una velocidad profesional.
Me atrajo hacia ella y logró la penetración deseada. Las piernas de Briza, a mi espalda, ejecutaban el abrazo de la boa y sus ondulantes movimientos se amoldaban a los míos mientras los suspiros nacían de ambas bocas.
Tomó sus senos y comenzó a amasarlos.
La vagina, de tan apretada, asemejaba el bucal previo que alucinó mis sentidos.
No pude contenerme. En el último estertor de mi éxtasis, ella explotó como un diapasón golpeado por una masa. Por segundos de diferencia ambos orgasmos no fueron un gran orgasmo compartido.
Sin embargo, nada mío quedó en el tintero.
A pesar de frescor otoñal del exterior, estábamos tan transpirados como si hubiésemos corrido la maratón de San Silvestre.
Y en realidad lo hicimos.
Sin inhibiciones ni pudor.
Fue una verdadera maratón de sexo y placer.
Al salir a la calle, después de tanto glamour sexual, el frío me transportó temporalmente al hoy del calendario.
Pero los recuerdos del instante vivido me persiguieron, hasta mi morada familiar.-
Total.esunratito
http://altoserver.com.ar/altosite/altos01/3972/book0.htm
Gif: 100 media hora, 150 la hora convencional (completo se arregla en el momento, yo no hice uso porque fue todo 10 puntos)
Lugar: Lavalle al 1800, pasando Callao.
Lugar: Muy bien instalado y con todo lo necesario.
Cuerpo: 10 (juvenil) Es ella, sin trucos fotográficos.
Cara: 9
Actitud: 10
Simpatía: 10
¿Reincidencia? Sin dudas. E iré por un dúo con la profe.[/quote:27d0fad5ac]MUY BUENO LO SUYO !!! QUE JAMON BRIZA !!! gracias por la data
[quote:e55bc74e54="elberZN"]FELICITACIONES TOTAL X LA XP :wink:
SE LA VE MAS QUE APETECIBLE A LA NEA :twisted:
[img:e55bc74e54]http://altoserver.com.ar/altosite/altos01/3972/foto02.jpg[/img:e55bc74e54][/quote:e55bc74e54]
Gracias, Briza es un jamoncito tierno para paladar negro.
Un abrazo
Total.esunratito
[b:f642727ca0]De mi mayor consideración:
Tengo el agrado de dirigirme al Señor total.esunratito para hacerle llegar mis sinceras y efusivas felicitaciones por dos razones fundamentales.
En primer lugar por la elección del diamante en bruto que ha elegido (Briza). Y no sólo la ha elegido sino que la ha degustado en toda su plenitud.
Yo no me hubiera animado a experimentar con alguien supuestamente tan inexperta, que por su relato no lo es.
En segundo lugar quiero felicitarlo por su rica prosa literaria, es un placer leer una xp relatada con tanta finura y respeto ...., respeto tanto hacia la protagonista como hacia el idioma ...., últimamente tan bastardeado.
Nuevamente felicitaciones.
Sin otro particular saludo a Ud. con mi consideración más distinguida.[/b:f642727ca0]
[quote:4ebeb4967f="Alexia"]No escribo en xp por pudor o respeto pero no puedo
mas que felicitarte no solo por tu encuentro,sino por
tu forma tan poetica y dulce de relatarla.
Sos un genio!!!Te doy mi mas por tu poesia!!!
alexia[/quote:4ebeb4967f]
Gracias Alexia, no soy poeta, sólo un intrépido atrapado en un mundo de realidades cambiantes a los que matizo con un poco de humor y ficción, para poder soportarlo.
Gracias por el +
Ahora, lo de dulce... ¿¿?? ¿Será cuestión de que me pruebes? :wink:
Total.esunratito
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