Vero de La Rúa & Justine - Xp Hardcore 100 %

Venía de una muy mala racha de xps. Tratando de encontrar nuevos lugares y con la idea de contar algo novedoso, me fuí comiendo garrones y momentos absolutamente olvidables. Quizás en algún momento y con algo de voluntad, se me de por comentar el largo recorrido de malos lupanares.

Ya harto de esta situación me puse a pensar en algo seguro. En aalguna recomendada y que sea garantía de buen trato. Así que me tuve que hacer a la idea de gastar unos pesos mas y que me devolviera algo del orgullo perdido. Tan malo venía el panorama que hasta había pensado en abandonar por un tiempo la busqueda de amor arancelado.

Pensé en varias chicas con las que ya había estado, pero me ganó la primera llamada que hice. Se trata de Vero de La Rúa. La había conocido un par de años atras y luego le perdí el rastro. Sabía que había aparecido tiempo atrás, así que fué mi primera opción. No tuve que llamarla mucho, y escuchar su voz ya fué un buen preludio de lo que se venía. Charlando de lo que haríamos en la intimidad me cuenta que esta con una amiga que yo conocía...???? Pero que me la presentaba al llegar al depto.

Me dejó muy intrigado y no me imaginaba quien podía ser. Así que fuí dispuesto a lo que fuera. Estaba a unas 10 cuadras de Tucumán y Callao, donde esta el bulo de Vero. Llego y ella me recibe con una sonrisa enorme y con una simpatía que contagiaba. Su típico flequillo que tan bien le queda y que tanto me gusta. Breve charla y aparece Justine. Enorme y grata sorpresa. No me la esperaba ya que pensaba que no estaba trabajando. Asi que si iba con un plan previo, rapidamente se fué al diablo.

Estaba con la guita justa y no pensaba en un trío. La verdad es que no me sentía con la confianza necesaria. En el baño me terminé de decidir. Me decía para mí, cuantas veces en la vida uno tiene una oportunidad así? No es algo que uno haga todos los días. Así que salí dispuesto a tener guerra con las dos. Aunque no hizo falta pensar mucho. Ni bien crucé la puerta, Vero me esperaba con algo menos de ropa y con unos deliciosos besos que me empezaron a calentar de una manera terrible. Así, sin quitarnos la boca uno del otro nos fuimos acercando a la cama. Yo ya estaba sin pantalones y encima de ella comiendo sus duritos y pequeños pechos. En el medio de los mimos, siento que alguien me intentaba arrancar el boxer. Era Justine que ya estaba detrás mío con intenciones de usar su lengua detrás mío. Cuando logró sacarme lo que me quedaba de ropa, ahí todo se fué al carajo....

Mientras yo seguía degustando la delgada figura de Vero, Justine se aferró a mis nalgas y con su lengua caliente empezó a darme unos muy ricos besos negros. Por dios!!! Hace cuanto no sentía algo así!!! Era una sensación terrible. Con mucha humedad y casi hirviendo sentía algo que me recorría por detrás. Era sumamente placentero. Sin darme cuenta Vero se me prendió al amigo y empecé a recordar el increible oral que ella sabe dar. Sin dudas, uno de los mas deliciosos que halla probado. Alternando de una manera muy deliciosa, intensidad, ritmo y profundidad. No se como hice para aguantar un pete tan hermoso y unos besos negros tan ardientes, al mismo tiempo.

Como pude logré darle fín a tal sometimiento de bocas, lenguas y labios. Para dar paso a otro tipo de desenfreno. Ahí si me puse a agarrar lo que pudiera o lo que me alcanzaran las manos. No se cuantas veces estuve dentro de una y dentro de otra. Los cambios de preservativos eran incesantes. Por momentos estaba arriba de Justine, luego arriba de Vero. Mas tarde estaba entremedio de las dos. O yo arriba de ambas. Nunca paramos. Fué un continuo movimiento de piezas. Un terrible intercambio de poses. Escucharlas hablar pegadas una a cada oído era enfermizo. Las cosas que me decían, la manera como me lo decían. Mientras me agarraban cada parte de mi cuerpo que tenían a mano. Sexo, sexo, mas sexo, mucho sexo. Una experiencia absolutamente hardcore. Con cuerpos sudados y mucho olor a sexo. Apoteótico. Glorioso. Encantador. Fué uno solo, laaaargo y muy intenso. Acabé todo lo que tenía encima de ellas, derramando mi humanidad en sus pechos.

Vero y Justine tienen cuerpos absolutamente diferentes. Una rubia, la otra morocha. Una menudita, la otra portentosa. Pero en servicio ambas son terribles. Toda la actitud, toda la onda, toda la dedicación. Creo que armaron una dupla temible y altamente explosiva. Son demoledoras y todo en ellas desprende sexo en cantidades embrigadoras.

No tengo mucho mas para agregar, mas que calificativos que quizás suenen exagerados pero que son absolutamente merecidos. El depto es chico, pero comodo. No tengo memoria para recordar mas detalles que no hacen al servicio. No faltó absolutamente nada. Pt sin de parte de ambas. Besos corrosivos de parte de ambas. Pude penetrar en todos los bellos orificios de ambas. No se mas que decir. Me dieron absolutamente todo y me fuí sin absolutamente nada. Sin dinero, sin fuerzas, sin piernas. Experiencia de antología.

xxx$ por todo concepto, una hora sin cronómetro.


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